(I put a Gadget of Google translator.)
LA CULPA DE AQUELLAS MIL DESGRACIAS
Vosotros tenéis la culpa,
de la caída del poder sobre vuestra cabeza vacía de los mil sueños borrados,
el dueño de tu ser, el alma está perdida bajo los sucios pies del señor del vil y oscuro dinero apostado a tu correcto fallo.
Vosotros tenéis la culpa,
sin más, de la muerte temprana del sol, la noche pronto llegará a esta ciudad...
habéis matado al día sutilmente y en el silencio más doloroso con la depresión del suicidio de los almas y de las buenas intenciones de esta trucada lucha.
Vosotros tenéis la culpa,
del lamento de mi tormento, el que castiga a la estima perdida en un alegre olvidado ayer,
de las horas de sueño vacío por estas mil lágrimas que escurren mis agotadas retinas, el reflejo de todo el dolor de mi alma sobre el cristal opaco de mis tristes y apagados ojos.
Vosotros tenéis la culpa,
de la pérdida de aquel querer del mal llamado amigo,
habéis roto los estamentos del plan de ese sentimiento con la otra esfera mágica, la de los cien mil besos y esos fuertes abrazos.
Vosotros tenéis la culpa,
del declive de este mundo, amos de la osadía y de esa vieja desidia de ser aquél que gobierne tristemente solo,
en la única compañía de sus gemelos avaros en cariño sano, abandonado en lo más hondo del cofre oxidado de nuestro pequeño humilde corazón en este precioso ya quemado y perdido lugar.
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